Canapés de queso facilones y para todos los gustos
Versátiles, deliciosos, inesperados, cromáticos y con métodos de elaboración adaptados a todos los niveles: desde los facilones para no complicarse la vida, hasta los más laboriosos, que pueden llevar unas horas de concentración y disfrute entre fogones. De lo que no cabe duda es de que los canapés son pequeñas obras gastronómicas en cuanto a forma y sabor. Nos salvan en más de una situación y, en compañía, resultan de lo más apetecibles. Y si el queso está presente y estas pequeñas delicias se pasean entre bandejas y continentes cuidados, de esos que te entran por los ojos, ¡no hay mucho más que añadir!
Los canapés fríos son un clásico para el paladar. Sobre una tosta alargada, sólo hay que cortar unas láminas de queso de cabra y acompañarlo con un toque de mermelada, que puede ser de cebolla, de albaricoque o de tomate. Sencillo y riquísimo. Si la idea es incrementar un poco más la intensidad de la frescura y la textura del queso, ahora que estamos en verano una buena alternativa es picar en dados un buen salmón ahumado, un aguacate y un poco de cebolla para acompañarlo. Se puede presentar en una tartaleta de masa quebrada o en un pan de pasas.
El queso de cabra, tan digestivo y rico en vitaminas A y B, es una excelente opción para protagonizar unas croquetas cremosas, un aperitivo muy resultón y amable al gusto. Desde Lácteos Martínez, os sugerimos el Queso de Cabra Semicurado D.O.P. Queso Camerano o, si se prefiere un queso de tres leches (vaca, oveja y cabra), nuestro Mezcla Curado “Etiqueta Roja”, que este año cumple su 50 Aniversario. Estos pequeños bocados cuya bechamel se elabora con leche, harina, mantequilla, pimienta negra y nuez moscada al gusto, son aún más deliciosos con queso. Luego sólo queda rebozar y ¡os las quitarán de las manos!
En esto de la gastronomía los hermanamientos funcionan muy bien así que, buceando por tierra y por mar, hemos aterrizado en León para preparar otro canapé muy sencillo y tremendamente gustoso. En Cecinas Nieto este tipo de carne en salazón se sigue elaborando como antaño, únicamente con la carne procedente de los cuartos traseros de vaca vieja o de buey, humo (de encina o de roble) y sal de las salinas de Torrevieja. Nuestra propuesta es combinar este alimento rico en hierro, calcio y sodio con uno de nuestros productos infalibles: el Queso de Vaca Añejo Señorío de Cameros. Y, si preferís enredaros entre sartenes, siempre se puede hacer un guiño a Asturias y preparar una miniatura de cachopo, relleno de cecina y de uno de nuestros quesos, con un “topping” de pimientos rojos asados, que en nuestra tierra riojana los hay riquísimos.
No nos olvidamos de terminar el encuentro con un canapé dulce y, siguiendo la línea de este post, facilísimos de elaborar. Los dátiles rellenos de queso azul no pueden ser más sencillos y caprichosos. Como segunda opción, una compota de manzana puede ser la base sobre la que colocar un ligero queso de Burgos con una cobertura de miel, nueces picadas y pasas. Sólo necesitarás una cuchara con forma de lágrima para presentarlo y ¡los invitados llorarán, pero de alegría!