La leche, y el queso, en los rituales del amor

Además de ser un alimento con grandes propiedades nutricionales y la materia prima sin la que no podríamos disfrutar del manjar del queso, la leche tiene también otro tipo de usos y significados. ¿Sabíais que es un elemento presente en los ritos nupciales de diversas culturas? Simboliza los buenos deseos de fertilidad, abundancia y felicidad para los recién casados.

Ahora que el calendario nos recuerda la cercanía de San Valentín, día de los enamorados, vamos a asomarnos a algunas de estas curiosas costumbres.

En Marruecos, la familia del marido aporta regalos como ropa, maquillaje o productos alimenticios, entre ellos aceite, sémola y leche. Además, en la ceremonia los novios se dan de comer y beber mutuamente dátiles y leche. En el salón del banquete, los invitados también esperan la llegada de los nuevos esposos mientras degustan este «piscolabis». 

En algunas zonas del país, al concluir los festejos, la suegra recibe en su nueva casa a su nuera con una bandeja con leche, en representación de la pureza, y dátiles para desearle fortuna. Le ofrece también un manojo de llaves y un pan, un gesto que simboliza que le abre las puertas de su nuevo hogar.

Fuente: viajesmarruecos.com

Cambiamos de continente y nos vamos a la India. Las bodas hindúes son acontecimientos repletos de simbolismo, colorido y rituales sagrados. Uno de ellos es el momento en que el novio pinta con polvo de color rojo, denominado sindoor, la línea divisoria del peinado de la novia, gesto que simboliza que es ya una mujer casada. La leche tiene también un papel destacado en los esponsales: es uno de los ingredientes de la bebida que el novio toma cuando llega al mandap, la gran tienda decorada con flores, guirnaldas y otros adornos en la que se celebrará la ceremonia. Allí espera la llegada de su futura esposa con una bebida a base de leche, mantequilla, yogur, azúcar y miel. (Imagen: Boda hindú).

Y, para los espléndidos, os gustará esta tradición en la región de Punyab, repartida entre India y Pakistán: los tíos maternos obsequian a la novia con 21 brazaletes de color rojo y marfil, purificados en una mezcla de leche y agua de rosas.

Chocante, sí, aunque no menos que la tradición escocesa en la que, a modo de despedida de soltera extravagante, las ¿amigas? de la novia la embadurnan con leche cortada, alquitrán, pescado o plumas. Se supone que, si supera este trance, nada se interpondrá en su camino hacia la felicidad. 

No podemos dejar de hacer referencia a la mitología clásica. Himeneo, el dios griego del matrimonio, debía aparecerse en las bodas para traer buena fortuna a los contrayentes. Para «sobornarle», le ofrendaban leche, vino y otros alimentos.

De un modo u otro, este alimento está siempre presente en las uniones de todo el mundo. En países como España, Portugal o Francia, cada vez es más común encontrar en los banquetes un buffet de quesos, habitualmente combinados con frutas y frutos secos, o una deliciosa fuente de queso fundido en la que sumergir distintos tipos de panes, nachos y similares. 

¿Cuál de estas costumbres os ha parecido más curiosa? 

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