Paseo y queso, una pareja ideal para el viaje del calcio
Dientes sanos, huesos fuertes, musculatura a tono… Cuando hablamos de este mineral vital para nuestra salud, de manera natural habrán pasado por vuestra mente diversas imágenes: una sonrisa que enmarca una dentadura estupenda, un atleta haciendo ejercicio, un trozo de queso en los labios, una persona mayor con un bastón… Efectivamente, estas asociaciones son habituales. Si queréis saber por qué, os invitamos a este interesante viaje por el calcio que comienza, literalmente, con un paseo en el que no puede faltar ¡un buen queso!
Antes de iniciar la caminata, es importante saber que nuestro cuerpo no genera calcio, sino que su aporte está vinculado a la ingesta de determinados alimentos dentro de una dieta saludable que debería proporcionarnos, diariamente, 1000 mg de este mineral. No obstante, el especialista es la persona que mejor nos aconsejará cuál es la proporción más adecuada en nuestro caso, ya que las generalidades no se aplican por igual a niños, embarazadas, mujeres con menopausia o personas de la tercera edad.
Una recomendación que encontramos a menudo, además de un menú equilibrado y del beneficio de hacer ejercicio, es la de pasear a diario a la luz del día, al menos durante diez minutos, lo que alimentará nuestra vitamina D, la misma que ayuda a absorber el calcio y a prevenir su déficit. No obstante, esta vitamina también se encuentra no sólo cuando se toma el sol (siempre con los debidos tiempos y precauciones), sino en pescados grasos como la caballa, el atún o el salmón, sin olvidar el aguacate, el huevo, el champiñón, el aceite de hígado de bacalao, el marisco ¡y el queso!
Una vez el calcio se ha absorbido correctamente, su importancia para nuestra salud va mucho más allá de fortalecer la dentina y mantener la densidad de los huesos. Entre la lista de virtudes destacan su papel para la correcta coagulación sanguínea, la absorción de la vitamina B12, la trasmisión de los impulsos nerviosos, la estimulación para secretar algunas hormonas y el funcionamiento de los músculos.
Imagen de un hueso sano y, a la derecha, con osteoporosis
Quizá os estéis preguntando qué puede provocar la hipocalcemia o insuficiencia de calcio. Entre otros, estaríamos hablando de osteoporosis (o porosidad en los huesos), calambres o raquitismo en los niños que precisan calcio y vitamina D. Así que, por nuestra salud, hagamos lo que está en nuestra mano: desde un paseo, hasta disfrutar de unos frutos secos, un plato de legumbres, un vaso de leche o un pedazo de queso. El Mezcla Curado «Etiqueta Roja» Los Cameros, Premio Alimentos de España 2023, está riquísimo incluso con un poco de fruta fresca, que también mejora la absorción del magnesio y del calcio del producto lácteo. ¡Gracias por acompañarnos en este paseo tan necesario!